La función que estuvo en desarrollo por más de un año finalmente se despliega globalmente: fotos instantáneas que desaparecen con un clic y sin filtros perfectos
La revolución de la autenticidad digital acaba de dar un paso gigantesco. Instagram ha lanzado oficialmente “Tomas” (conocida internamente como “Peek”), su respuesta directa al cansancio colectivo de la perfección artificial que domina las redes sociales. Esta nueva función promete devolver la espontaneidad a una plataforma que se había convertido en una galería de momentos excesivamente curados.
Después de más de doce meses de desarrollo secreto y pruebas limitadas, Meta ha decidido apostar por la inmediatez sobre la perfección estética. La propuesta es radical: compartir momentos reales, sin retoques, sin segundas oportunidades, y con la certeza de que desaparecerán tan rápido como llegaron.
Esta actualización representa mucho más que una nueva herramienta; es una declaración de intenciones sobre el futuro de la comunicación digital. Instagram reconoce implícitamente que sus usuarios buscan conexiones más genuinas, alejándose del exhibicionismo perfeccionista que caracterizó la década pasada.
¿Qué es una toma en Instagram?
Una “toma” es esencialmente una fotografía capturada y compartida en tiempo real que puede ser visualizada únicamente una vez antes de desaparecer para siempre. Es el equivalente digital de mostrar algo rápidamente con las manos: efímero, directo y sin posibilidad de archivo permanente.
La filosofía detrás de las tomas radica en eliminar la presión de crear contenido “perfecto”. No hay oportunidad para filtros elaborados, ajustes de iluminación o poses estudiadas. La cámara se activa, capturas el momento, seleccionas quién puede verlo y la imagen se comparte instantáneamente.
Esta funcionalidad representa un retorno a los orígenes de la fotografía digital casual, cuando las imágenes servían para documentar momentos específicos. Las tomas recuperan esa naturalidad perdida en la era de los influencers y la fotografía profesionalizada para redes sociales.
El concepto también introduce un elemento de intimidad que Instagram había perdido gradualmente. Al permitir seleccionar específicamente quién puede ver cada toma, los usuarios recuperan control sobre su audiencia, creando círculos de confianza más pequeños y significativos.
La nueva actualización de Instagram: Más que solo tomas
La implementación de “Tomas” forma parte de una estrategia más amplia de Meta para reposicionar Instagram frente a competidores como Snapchat, BeReal y TikTok. La actualización no solo introduce esta función, sino que reorganiza fundamentalmente la experiencia de mensajería privada dentro de la aplicación.
Para acceder a las tomas, los usuarios deben dirigirse a la sección de mensajes directos, donde encontrarán un nuevo ícono de cámara en la esquina superior derecha. Este botón activa instantáneamente la cámara del dispositivo, eliminando los pasos intermedios que tradicionalmente separaban la captura del intercambio.
La integración es deliberadamente simple: un toque activa la cámara, otro captura la imagen, y un tercero la envía. No hay menús complejos, opciones de edición o tiempos de espera. La inmediatez es el elemento central de la experiencia.
Meta ha confirmado que las tomas no se almacenan en los servidores de Instagram una vez visualizadas, lo que representa un cambio significativo en la filosofía de almacenamiento de datos de la compañía. Esta decisión refuerza el compromiso con la privacidad y la temporalidad del contenido.
La actualización también incluye notificaciones específicas para las tomas, diferenciándolas de los mensajes directos tradicionales. Los usuarios reciben alertas distintivas que indican cuándo alguien ha enviado una toma, creando un sentido de urgencia y exclusividad alrededor de este tipo de contenido.
El ecosistema de privacidad: Control total sobre la audiencia
Una de las características más innovadoras de las tomas es el control granular sobre quién puede visualizar cada imagen. A diferencia de las historias, que se comparten con todos los seguidores o listas predefinidas, cada toma puede enviarse a usuarios específicos seleccionados individualmente.
Este nivel de personalización transforma a Instagram en una herramienta de comunicación más íntima. Los usuarios pueden compartir momentos específicos con personas específicas, creando múltiples narrativas simultáneas según la audiencia. Una toma del desayuno para amigos cercanos, otra del trabajo para colegas, y una diferente para familiares.
La función también introduce un elemento de reciprocidad. Los usuarios pueden responder a las tomas con sus propias capturas instantáneas, generando conversaciones visuales efímeras que desaparecen completamente una vez concluidas. Esta mecánica fomenta intercambios más naturales y menos performativos.
Impacto en la cultura digital
La llegada de las tomas podría marcar un punto de inflexión en la cultura de redes sociales. Durante años, Instagram ha sido criticado por promover estándares de belleza irreales y estilos de vida inalcanzables. Las tomas representan un contraargumento directo: la belleza de lo imperfecto, lo espontáneo, lo real.
Esta función podría influir especialmente en usuarios jóvenes, quienes han crecido en un entorno digital altamente curado. Las tomas les ofrecen una alternativa para expresarse sin la presión de mantener una imagen pública consistente y perfecta.
Los creadores de contenido también enfrentan un nuevo paradigma. Las tomas no pueden monetizarse directamente ni utilizarse para construir audiencias masivas. Esto obliga a replantear estrategias de engagement y a valorar conexiones genuinas sobre métricas de alcance.
Desafíos y futuro
La implementación exitosa de las tomas dependerá de la adopción masiva de los usuarios. Meta enfrenta el desafío de cambiar hábitos establecidos y convencer a millones de usuarios de que la imperfección puede ser más valiosa que la perfección curada.
También existe la pregunta sobre la sostenibilidad del modelo. Si las tomas no generan datos permanentes para el algoritmo de Instagram, ¿cómo afectará esto las capacidades de personalización de contenido de la plataforma?
El futuro de las tomas dependerá de su capacidad para generar conexiones más significativas entre usuarios, transformando Instagram de una plataforma de exhibición en una herramienta de comunicación auténtica. La nueva actualización de Instagram no es solo una función adicional; es una apuesta por redefinir qué significa compartir en la era digital.