La banda animada más ambiciosa del planeta lanza su segundo sencillo con Trueno y colaboraciones póstumas que exploran la vida, la muerte y todo lo que hay en medio
La maquinaria creativa de Gorillaz no se detiene. Apenas un mes después de sacudir las expectativas con el anuncio de su próximo álbum y el lanzamiento de su primer adelanto, la banda virtual comandada por Damon Albarn vuelve a la carga con ‘The Manifesto’, un ambicioso sencillo de siete minutos que fusiona hip hop, instrumentación india y reflexiones existenciales sobre el ciclo de la vida. Si pensabas que ya habías visto todo lo que Gorillaz podía ofrecer, prepárate para recalibrar tus expectativas.
‘The Manifesto’ no es simplemente otra canción en el catálogo de una banda que ha redefinido constantemente los límites entre lo virtual y lo real, lo occidental y lo oriental, lo comercial y lo experimental. Es una declaración de intenciones, un manifiesto sonoro que establece las coordenadas temáticas y estéticas de lo que promete ser uno de los lanzamientos más significativos de 2026. Con una duración que desafía la era del streaming instantáneo, esta pieza exige atención completa y recompensa la paciencia del oyente con capas de complejidad musical que se revelan con cada escucha.
Gorillaz y ‘The Manifesto’: una sinfonía multicultural
Donde otros artistas podrían conformarse con un featuring convencional, Gorillaz construye toda una arquitectura sonora que atraviesa continentes y tradiciones musicales. ‘The Manifesto’ convoca a una constelación de talentos que raramente compartirían el mismo espacio: el rapero argentino Trueno aporta su flujo característico en español, mientras que la aparición póstuma de Proof —el legendario MC de D12 y mejor amigo de Eminem— añade una dimensión emotiva y nostálgica que resuena con los temas de trascendencia del álbum.
Pero la verdadera magia ocurre cuando el hip hop se encuentra con la música clásica india. Los hermanos Amaan Ali Bangash y Ayaan Ali Bangash, maestros del sarod (un instrumento de cuerda tradicional), tejen melodías hipnóticas que dialogan con los beats contemporáneos. Ajay Prasanna al bansuri —la flauta de bambú india— agrega texturas etéreas, mientras que la sección de metales de Jea Band Jaipur inyecta energía festiva. The Mountain Choir completa este mosaico con armonías que elevan la composición hacia territorios casi espirituales.
Esta no es una colaboración superficial diseñada para sumar reproducciones en plataformas. Es un experimento genuino de fusión cultural que solo una banda como Gorillaz, libre de las ataduras de la imagen física y las expectativas de género, podría ejecutar con tal convicción. El resultado suena simultáneamente antiguo y futurista, local y global, terrenal y trascendente.
Gorillaz, Trueno y el puente transatlántico del hip hop
La inclusión de Trueno en ‘The Manifesto’ representa más que un guiño al mercado latinoamericano. Es el reconocimiento de que el hip hop contemporáneo habla múltiples idiomas y que las fronteras que alguna vez separaron escenas regionales se han vuelto porosas. El rapero argentino, que ha conquistado audiencias masivas con su mezcla de líricas introspectivas y ritmos contundentes, encaja perfectamente en el universo ecléctico de Gorillaz.
Trueno aporta una perspectiva fresca que contrasta con la melancolía nostálgica que trae consigo la voz de Proof. Esta yuxtaposición generacional —el veterano fallecido y el joven fenómeno latinoamericano— subraya uno de los temas centrales del proyecto: el ciclo perpetuo de nacimiento, muerte y renacimiento que define tanto la existencia humana como la evolución cultural. Es un recordatorio de que mientras algunos artistas parten, otros emergen para continuar la conversación.
La decisión de Gorillaz de colaborar con artistas de habla hispana no es nueva —recordemos sus trabajos previos con músicos latinos—, pero la presencia de Trueno señala una intención más profunda de conectar con las nuevas generaciones de oyentes que consumen música sin prejuicios geográficos ni lingüísticos. En una era donde el reguetón y el trap latino dominan las listas globales, Gorillaz demuestra que el hip hop consciente en español también merece un lugar en la conversación internacional.
Gorillaz y el largo camino hacia su nuevo disco
‘The Mountain’, el nombre del próximo álbum, no llegará hasta el 20 de marzo de 2026, lo que significa que los fans deberán armarse de paciencia mientras la banda va revelando piezas de este rompecabezas sonoro. Esta estrategia de lanzamiento pausado contrasta dramáticamente con la cultura del “drop surprise” que domina la industria actual, pero es consistente con la manera en que Gorillaz ha operado históricamente: tomándose su tiempo, construyendo narrativas complejas y permitiendo que cada canción respire antes de presentar la siguiente.
‘The Mountain’ marca un hito adicional en la trayectoria de la banda: será su primer lanzamiento bajo KONG, su propio sello discográfico. Este movimiento hacia la independencia creativa sugiere que Albarn y su equipo buscan mayor control artístico sobre su producción, liberándose de las presiones comerciales que a veces limitan la experimentación. Si ‘The Manifesto’ es una indicación de la dirección musical del álbum completo, podemos anticipar un trabajo conceptual ambicioso que no teme desafiar las convenciones del pop contemporáneo.
Para celebrar el lanzamiento, Gorillaz ha anunciado una gira por Reino Unido e Irlanda que visitará Birmingham, Glasgow, Leeds, Cardiff, Nottingham, Liverpool, Belfast y Dublín. Estas presentaciones prometen ser experiencias multimedia inmersivas donde la música se encuentra con la animación en tiempo real, algo que la banda ha perfeccionado a lo largo de dos décadas de actuaciones innovadoras.
‘The Manifesto’ funciona como una declaración de principios: Gorillaz sigue siendo una fuerza creativa imparable que se niega a repetir fórmulas. Con siete minutos de duración en una época donde la atención se mide en segundos, con colaboraciones que cruzan idiomas, géneros y hasta la barrera entre vida y muerte, esta canción confirma que la banda animada más importante del siglo XXI no ha perdido su capacidad de sorprender. Ahora solo resta esperar a marzo de 2026 para descubrir qué otras maravillas esconde ‘The Mountain’.







